En la era de constante reinvención en la que viven las tecnologías es importante valorar muchos factores a la hora de abrazar una. Gartner ha hecho sus apuestas identificando 10 tendencias tecnológicas con valor estratégico suficiente para tener un impacto considerable dentro de una empresa.
La capacidad de disrupción, tanto del sector o de la experiencia de cliente, así como de los sistemas informáticos utilizados, es altamente valorada. Pero también otros factores han jugado un papel clave a la hora de identificar las tendencias tecnológicas que desde 2016 “moldearán la industria digital hasta 2020” en palabras de David Cearley, vicepresidente de Gartner.
1. Red de dispositivos
Cada día más y más dispositivos son utilizados como puente a la información, datos, soluciones, aplicaciones o incluso personas, negocios e instituciones. El auge de los wearables o los sensores en ecosistemas de Internet de las Cosas abren una miríada de posibilidades a las empresas.
2. Experiencia ambiental de usuario
Aunque la punta de lanza mediática de esta tendencia serían la realidad virtual y la realidad aumentada, estas experiencias envolventes no lo son todo. La experiencia ambiental de usuario debe trascender las barreras de la malla de dispositivos, el espacio y el tiempo.
3. Materiales de impresión 3D
Aleaciones de níquel, fibra de carbono, cristal, materiales farmacéuticos o biológicos… son solo algunos de los ejemplos que han logrado extender la impresión 3D a sectores tan dispares como el aeronáutico o el de la salud. Las previsiones de crecimiento para la industria de materiales de impresión 3D se prevé que crezca, de media, en un 65% anual hasta 2019.
4. Información de Todo (Information of Everything)
Todo elemento de la malla digital produce, transmite y utiliza información. Aprovecharla mediante estrategias de inteligencia empresarial puede significar que cantidades ingentes de información hasta ahora considerada obsoleta, ininteligible, incompleta o simplemente no disponible, reporte beneficios inesperados.
5. Aprendizaje avanzado – Inteligencia artificial
La inteligencia artificial ya ha llegado al punto en que puede producir máquinas capaces de aprender de su entorno de manera completamente independiente. Las DNN (redes neurales profundas, en inglés deep neural nets) son las que posibilitan que las máquinas nos parezcan inteligentes. El valor de este avance radica en la clasificación y análisis de datos, cada día menos factible a escala humana.
6. Implementación de agentes autónomos y semiautónomos
Robots, vehículos autónomos, asistentes personales virtuales o robo advisors ya han entrado en nuestro día a día. Todos ellos son precursores del futuro cercano en la robótica, que siempre goza de mayor atención mediática, pero también de la ingeniería de inteligencia artificial, que tiene en Siri, Now y Cortana sus máximos exponentes.
7. Arquitectura de seguridad adaptativa
Acomodarse con la seguridad perimetral y la basada en normas no es suficiente en un tiempo en que cada vez más empresas trabajan en materia de integración con APIs y contratan cada vez más servicios en la nube. La “industria hacker” está en alza y el carácter de la economía algorítmica solo hacen que ampliar el número de amenazas digitales potenciales. La prevención y la solidez van a ser claves, sin olvidar que la innovación ya no procede de cajas oscuras.
8. Arquitectura de sistemas avanzados
Las arquitecturas (computacionales) neuromórficas, basadas en matrices de puertas programables por campo (en sus siglas en inglés, FPGAs) aseguran un futuro más que cercano de alta eficiencia energética y velocidades que superan el teraflop.
9. Arquitectura de aplicaciones y servicios de fácil integración
La arquitectura de aplicaciones y servicios tiene que ser escalable, flexible y ágil. Apoyándose en los servicios en la nube, una nueva hornada de apps y servicios llevarán la experiencia de usuario a otro nivel. Uno en el que la experiencia transdispositiva sea una realidad.
10. Plataformas de Internet de las Cosas
Para sustentar la malla del ecosistema IoT (del inglés, Internet of Things) es vital un trabajo arquitectónico computacional que lo maneje, integre y proteja. Cualquier empresa con iniciativas de Internet de las Cosas en mente deberá plantarse también una plataforma que aloje dicho ecosistema.
Las 10 tendecias tecnológicas para el 2016